Impuesto al patrimonio

El impuesto al patrimonio cada día es más tomado en cuenta como una herramienta de política fiscal y social, te contamos cómo funciona, sus efectos y más.

En el último tiempo ha estado bastante presente la discusión de la posible implementación de un impuesto al patrimonio, este escenario ha sido planteado principalmente por el candidato a la presidencia de Chile Gabriel Boric, quien planea crear un impuesto patrimonial al 0,1% más rico de Chile, alcanzando a recaudar un 1% del PIB, según su programa de gobierno del 24/10/2021.

¿Qué es el impuesto al patrimonio?

Un impuesto al patrimonio es una obligación para pagar un cierto porcentaje del patrimonio (activos menos pasivos) de una persona o empresa al estado, estos impuestos pueden ser progresivos (van aumentando a medida que crece el patrimonio) o fijo (misma tasa de pago para todos). Estos impuestos se usan principalmente para intentar de reducir la brecha patrimonial entre ricos y pobres, según plantean sus adeptos, además de usarse como método de financiamiento del estado, a pesar de esto, este método impositivo tiene variados puntos negativos que más adelante abordaremos.

¿Qué plantea el candidato presidencial?

Gabriel Boric plantea dentro de su programa de gobierno, la implementación de un impuesto patrimonial extraordinario y el estudio de uno permanente, nos centraremos en el primero de ellos, para analizarlo y sacar conclusiones de su efectividad para lograr su objetivo.

Con este impuesto, se busca recaudar un 1% del PIB con el impuesto al 0,1% de más ricos, esto vendría siendo US$252 millones de recaudación extra.

¿Es posible recaudar esa cantiadad de dinero?

Claramente, la mayoría de las veces se podría cumplir esa meta, sin embargo, esto dependerá de la tasa que se aplicará al 0,1% de los más ricos, como también de los incentivos que tengan los ricos a evitar el cobro. En principio, los ricos podrían cambiar su domicilio tributario, lo que significa que estos decidan vivir fuera del país, y se establezca en otra jurisdicción como persona natural, teniendo en cuenta que son riquezas altas, es aún más fácil migrar, ya que un sin número de países ofrecen visas de residencia para inversionistas de altos patrimonios.

Experiencia comparada

En el mundo no existen muchos países que ocupen el impuesto al patrimonio, de hecho, es una anormalidad, podemos tomar el ejemplo de 6 países que han ocupado este tipo de recaudación en los últimos años, estos son:

  • España
  • Noruega
  • Suiza
  • Bélgica
  • Colombia
  • Uruguay

En el caso de noruega, se impone un 0,85% sobre patrimonios netos de más de 1,5 millones de coronas noruegas (unos 147 millones de pesos chilenos), este tipo de impuesto afecta a una importante proporción de la población noruega, debido al bajo limite desde donde se empieza a cobrar el impuesto. Este impuesto funciona desde 1892, y es algo habitual dentro del país, pero su efectividad es bastante baja teniendo en cuenta que también afecta a sectores medios del país, tan solo alcanza a recaudar un 0,45% del PIB, lo que es bajo para la masa de personas que pagan el impuesto.

Un caso más cercano a Chile es el de Uruguay, donde se aplica este impuesto a fortunas sobre 4.937.000 pesos uruguayos (unos 92 millones de pesos chilenos), se toma en cuenta el patrimonio de la persona, pero se restan a esto el patrimonio en el exterior e inversiones agrícolas. Si nos damos cuenta, el monto de partida de cobro es bastante bajo al igual que noruega, pero tan solo recauda un 1% del PIB uruguayo.

Efectos para la economía y fortunas personales

Dentro de los efectos para la economía de un proyecto como este, existen varios tópicos a tomar en cuenta, pero los más importantes son.

Desincentivo de tener residencia tributaria en Chile

En un mundo globalizado y con pocas barreras de movimiento personal y financiero, el emigrar es cada vez más fácil, sobre todo si se tiene grandes sumas de dinero, si se compara con la situación actual, la implementación del impuesto al patrimonio personal pone a pensar a los ricos sobre la utilidad de mantenerse en el país, más si se piensa implementar de forma permanente. La posibilidad de establecerse en otro país tiene costos económicos bastante bajos para personas de grandes recursos, sin embargo, también hay que tomar en cuenta que puede tener un costo emocional (dejar a la familia, amigos, cultura, etc.), aunque también podría ser una decisión emigrar como grupo familiar.

Inversión extranjera como persona natural con residencia en Chile.

Un inversionista extranjero de alto patrimonio que tenga la opción de venir a Chile para establecer un negocio y establecerse como persona en el país, verá esta opción como menos atractiva, debido a que tendrá que pagar un impuesto alto.

Fiscalidad más pobre con emigración de ricos

En el caso que varios ricos cambien de país de residencia, la fiscalidad del país pierde recursos que antes pagaban los ricos como persona natural, como lo es el impuesto a la renta de personas. Un ejemplo de aquello es el caso de los youtubers españoles, que han migrado a Andorra, con tal de evitar los altos impuestos de España, esto no solo genera que no se les pueda cobra el impuesto al patrimonio, si lo extrapolamos al caso chileno, sino que también se perderían los ingresos de los otros impuestos personales que antes pagaban esos ricos.

Conclusiones

Creemos que la aplicación de impuestos al patrimonio puede resultar siendo regresivo, ya que estimula la “fuga de capitales personales” por la emigración, terminando en una disminución de ingresos fiscales, además las estimaciones de lo planteado por el programa de Gabriel Boric son poco cercanas a la realidad, ya que un 1% de recaudación es una cifra importante, que implicaría tener un impuesto más fuerte que en el resto de los países que lo aplican, ya que en estos se aplica a una mayor masa de personas, además de no tomar en cuenta los efectos negativos que tiene este tipo de impuestos en una economía dinámica.

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